¿Mi negocio está al 100?

Seguramente llevemos tiempo operando nuestro negocio pero, ¿Pero, has notado algún cambio? Puede que estemos cuidando cada detalle y eso se puede ver recompensado en nuestras ganancias a fin de mes. Y si no es así, puede que hayamos dejado de lado cosas de gran importancia por la que se vean afectadas la ganancias. Si quieres darle un chequeo rápido a tu negocio, solo contesta estas 3 sencillas preguntas preguntas:

 

¿Cómo van nuestras ventas?

Un motivo por el que se podemos ver reducidas las ventas, es porque no mostramos nuestro producto en la forma en la que ahora nuestro cliente prefiere verlas. Si piensas en la función que tiene tu producto en la vida de tus consumidores, ¿existe alguna forma de obtener este beneficio de manera más fácil, económica o rápida? Hay muchas razones por las cuales ahora una persona puede elegir ciertos productos que antes no consumía. Tanto la estrategia de venta, como las redes sociales y la experiencia de compra del usuario, afectan directamente en su decisión para comprar.

 

¿Está capacitado tu personal?

La valoración de qué tan buen producto o servicio tengas, cae en las manos de tu personal, esto nos ayuda a ver que tan capacitados están para su trabajo. Recuerda que invertir en el personal, es invertir en el negocio. Si invertiste en modernizar tus procesos, en una plataforma, en un sitio web o en cualquier elemento de mejora para tu negocio, pero tu personal no sabe cómo utilizarlo o aprovecharlo para tener un mejor acercamiento con los clientes, debes capacitarlos! Si nos damos cuenta de estos problemas tarde, puede que se vea reflejado en nuestras utilidades!

 

¿Cómo ven a tu negocio?

La imagen que perciban tus clientes (tanto potenciales como los actuales) sobre tu negocio, es importantísima para incrementar tus ventas. Recuerda que un cliente satisfecho, trae muchas cosas buenas, principalmente las referencias de sus conocidos!

Los clientes aman sentirse atendidos y buscan que los sorprendan, es por eso que una excelente recomendación es brindar siempre la mejor atención, tanto presencial como virtual. Contestar sus dudas y no dejarlos esperar, porque ellos aprecian que valoren su tiempo y sus inquietudes.

 

 

Después de hacerle este chequeo a tu negocio, procura sanarlo para que esos esfuerzos se vean reflejados en nuestras ganancias!

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